El exvicepresidente de Estados Unidos Joe Biden se dirigió el viernes a la Coalición Rainbow PUSH del reverendo Jesse Jackson, un día después de una dramática confrontación sobre su historial de derechos civiles en el segundo debate presidencial demócrata con vistas a 2020.
La senadora por California Kamala Harris criticó a Biden el jueves por defender recientemente haber trabajado con segregacionistas en el Senado y por oponerse al transporte obligatorio de estudiantes a escuelas públicas segregadas hace décadas.
El momento se convirtió en una sensación para Harris y dejó a Biden diciendo que su registro había sido mal caracterizado. Pero le hizo parecer inseguro de sí mismo durante largos períodos.
El discurso del viernes en Chicago podría ayudar a Biden a apuntalar su apoyo con los afroamericanos, un grupo demográfico clave que lo ayudó a construir una ventaja temprana en las elecciones primarias demócratas.
Biden habló sobre una serie de acciones que había tomado en su larga carrera para promover los derechos civiles e insistió: “Nunca, nunca, nunca, nunca me he opuesto al transporte voluntario”.
“Amigos, la discusión en esta carrera no debería ser sobre el pasado”, dijo.
Biden enfrentó la más reciente de varias controversias importantes en su campaña de dos meses de duración, los contratiempos que ha logrado sobrevivir mientras continúa encabezando las encuestas en esta etapa temprana de la carrera de 2020.
El discurso del viernes en Chicago podría ayudar a Biden a apuntalar su apoyo con los afroamericanos, un grupo demográfico clave que lo ayudó a construir una ventaja temprana en las elecciones primarias demócratas.
VOA
