La cifra de muertos por el atentado con un camión en la capital de Somalia ha superado los 300, dijo el lunes el director de un servicio de ambulancias, mientras el país sigue muy afectado por el ataque más letal en su historia.
Más personas fallecieron en las últimas horas a consecuencia de sus heridas, indicó el doctor Abdulkadir Adam del servicio Aamin Ambulance.
Los funerales comenzaron, y se espera que el número de muertos vuelva a subir.
El atentado con un camión el sábado fue realizado en una calle muy concurrida en Mogadiscio, y aproximadamente 300 personas más resultaron heridas. El gobierno de Somalia culpa al grupo extremista al-Shabab, vinculado con al-Qaida, que aunque a menudo reivindica los ataques en Mogadidiscio, hasta ahora no ha hecho declaraciones al respecto.
De todas maneras, cientos de furiosos manifestantes tomaron las calles para condenar a al-Shabab. “Ya sea que asuman o no la responsabilidad no importa, sabemos lo que ha sucedido”, dijo a la Voz de América el exoficial de inteligencia Abdi Hassan Hussein. “La información que estamos obteniendo hasta ahora muestra que esto es obra de al-Shabab, tiene su sello”.
“Dónde esta mi hijo, luchen contra los perversos, al diablo con ellos, mi dios condena el mal”, decía una anciana entre la multitud de manifestantes. Otros gritaban consignas contra al-Shabab.
En Washington, el Departamento de Estado condenó el ataque en “los más fuertes términos”.
“Frente a este acto insensible y cobarde, Estados Unidos continuará apoyando al gobierno de Somalia, su pueblo, y a nuestros aliados internacionales para combatir el terrorismo y apoyar sus esfuerzos por alcanzar la paz, seguridad y prosperidad”, dijo en un comunicado.
